
No
todos los papeles son iguales; su composición y características pueden
variar ampliamente, por eso resulta de gran importancia la elección
del soporte correcto. El diseñador debe conocer las características
de los papeles que va a utilizar.
También existen otros agentes que vale considerar que influyen
en su envejecimiento. Están los agentes de deterioro interno
(los que derivan de su manufactura) y los de deterioro externo (dependen
del medio en el que se encuentre y de su manipulación); también
la luz puede resultar muy dañina (por ejemplo causar decoloración).
La temperatura actúa
como catalizador al acelerar la degradación y pérdida
de propiedades de los materiales (por ejemplo, pérdida de flexibilidad
y quiebre). La humedad excesiva hace que el papel absorba agua con
el consecuente desarrollo de microorganismos favorecido por la luz.
Para garantizar que la celulosa del papel no pierda estructura, debería
mantenerse una temperatura y humedad baja, de 18º promedio, ya
que los hongos y bacterias proliferan en lugares oscuros y calientes
con poca ventilación. El
uso de papeles estables y libres de ácido (neutro o alcalino)
es otro tema a considerar.
Existen diferentes tipos de papeles para diferentes usos. Hay papeles
resistentes al deterioro por el uso o a la agresión de agentes
biológicos (hongos, bacterias), a la humedad o al fuego. Esto
en ciertos casos se logra incorporando productos en el proceso de fabricación.
También están los papeles de seguridad usados para evitar
fraudes por adulteración o falsificación en cuya composición
se agregan productos químicos en masa, que en contacto con ciertos
elementos, producen reacciones visibles. El espectro posible de papeles
de seguridad es amplio, desarrollándose productos a la medida
de las necesidades de cada cliente. Los hay con marca de agua; con hilos,
fibras y pigmentos de seguridad, con encolados especiales, fibras sintéticas
y diversos tipos de reactivos químicos. Los papeles fabricados
con pastas ECF (libres de cloro elemental) aseguran una mayor duración
en el tiempo.
Algunos tipos de papel son:
Vergé: El que lleva una filigrana de rayitas menudas y otras,
más separadas, que las cortan perpendicularmente.
Reciclado: Aquel que emplea papel usado (preconsumo
y postconsumo).
Especiales: Usados para la industria gráfica,
de calidad premium, con diferentes acabados, texturas y colores.
Satinado: El que ha sido pasado por la calandra para
darle brillo y tersura por ambas caras.
Secante: El de trapo de algodón sin cola y absorbente; las calidades
más baratas son simples papeles de impresión sin cola.
Tela: Tejido muy fino de algodón, engomado por
ambas caras y transparente; se usa para calcar.
Vegetal: Papel sulfurizado.
Estucado: El muy satinado y lustrado, empleado principalmente
para la impresión de ilustraciones; por lo común se le
da un apresto a base de caolín o talco, pasando la hoja entre
dos cilindros impregnados por un tercero. Para saber más consúltenos por
información adicional.
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